La tasa de pruebas fue determinante para que 54 comunas estuvieran súbitamente en alerta roja. Algunos alcaldes desconocen los criterios, otros se enteraron en las últimas horas.
Por Isaias Morales
El ministerio de Salud (MSPAS) cambió en los últimos días los parámetros para catalogar que 158 municipios están en alerta roja, 109 en naranja y 73, amarilla. No hay ninguno en verde por ahora, con lo cual en ninguna región reanudaron todas las actividades.
El 17 de julio, el director de la Comisión Presidencial de Atención a la Emergencia COVID-19 (Coprecovid), Edwin Asturias, explicó que la tasa de casos por cada 100 mil habitantes y el porcentaje de pruebas que resulten positivas serían claves para determinar qué color obtendría cada municipio en el tablero a partir de este 27 de julio.
Sin embargo, los parámetros cambiaron, ya que otro factor que medirá Salud es la tasa de pruebas por cada 1 mil habitantes por día a nivel local. Las autoridades no explicaron en cadena nacional ni en el sitio covid19.gob.gt cómo funcionarán estos indicadores. Lo hizo la ministra de Salud, Amelia Flores, a través del acuerdo 187-2020 publicado en el Diario de Centroamérica.
Alcaldes consultados coinciden en que estas disposiciones no las conocían. El presidente de la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam), Miguel Ovalle, dice que cuando se reunió con el presidente Alejandro Giammattei el pasado viernes aun no conocía de estos criterios, sino hasta el domingo 26 por la noche.
Tras el anuncio, un grupo de pobladores de San Lucas Tolimán, el único municipio en rojo del departamento de Sololá quemó las instalaciones de la alcaldía. En este lugar se registra una tasa de 25.33 casos por cada 100 mil habitantes del 10 al 23 de julio, pero este no fue el único factor para elevar el nivel de alerta.
El porcentaje de positividad del 34.7 por ciento y la tasa de pruebas de 0.05 fueron también determinantes para la categoría que Salud le asignó. Este cálculo se realiza por tres puntuaciones que se suman y así determinar la alerta.
Es decir, este municipio obtuvo 3 puntos por la incidencia de casos; 4 puntos más por el porcentaje de pruebas positivas mayor al 25 por ciento, y otros 2 por la tasa de muestras menor a 0.4. Con ello obtuvo 9 puntos.
Si un municipio, dice el MPSAS, supera los 7.5 puntos es suficiente razón para marcarlo en rojo, no basta con que tenga menos de 55 casos por cada 100 mil habitantes, si solo se midiera un indicador.
Esto sucedió con 54 alcaldías, como en El Progreso, Jutiapa, que obtuvo 8 puntos porque en las últimas dos semanas su tasa de contagios llegó a 15.88 (menor a 55), el porcentaje de pruebas positivas fue de 28.8, y la tasa de 0.03.
El alcalde de este municipio, Marvin Zepeda, ve dos razones por las cuales su municipio está en esa categoría. Una es que en los últimos días se registraron tres casos de vecinos que no viven en el municipio, pero son originarias de ahí, y la otra es que las pruebas que realiza Salud, además de ser insuficientes, demoran.
El funcionario relató el caso de un integrante de su corporación que se realizó la prueba hace tres semanas y a la fecha no recibe los resultados. Por ello compró sus propios test para los vecinos, aunque este gasto aun no figura en Guatecompras.
El alcalde de Guastatoya, El Progreso, otro de los municipios con alerta máxima, Jorge Orellana¸ admite que su municipio registró más contagios en las últimas semanas, pero el problema que ve está en la demora en llevar pruebas. Al consultarle si conocía de los criterios para categorizar a los municipios indicó que el área de Salud del departamento aún no les informa, y que la próxima reunión prevista está para este martes 28 de julio.
Ovalle, el presidente de la Anam, indicó que la disponibilidad de pruebas fue un tema tratado en la reunión donde se les habló a los alcaldes sobre el Semáforo de Alertas. “Me acabo de reunir con el encargado de Salud de acá de Salcajá, y me dijeron que solo tienen cinco pruebas, y que tampoco tienen en el área de Quetzaltenango”, expresó.
“La ministra de Salud dijo que se encargaría de que todas las áreas de Salud departamentales estuvieran abastecidas para sus municipios, pero por lo visto no se ha hecho”, agregó.
Improvisación
A criterio de Karin Slowing, médica y exsecretaria de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplan), el proceso de definir la metodología para las alertas a nivel municipal debió ser técnico y sólido basado en la evidencia, lo cual, a su criterio, no se hizo por las pocas pruebas realizadas.
“Están acomodando criterios para justificar y que parezca técnica una decisión arbitraria de abrir la economía a cualquier costo. Estas cosas no deberían ser improvisadas, sino advertidas previamente de qué criterios van a usar y hacer todo eso público para que lo repliquen organizaciones independientes”, manifestó.
El gobierno indicó que el Tablero de Alertas se actualizará cada 15 días. Para conocer cómo funciona y qué actividades pueden realizarse según el nivel de alerta entra acá https://covid19.gob.gt/tablero.html