El contrato de Q12.8 millones se otorgó mediante el fideicomiso recién creado. La compañía obtuvo un permiso a última hora para comenzar el proyecto.
Por Isaias Morales
Cobán tendrá su propia Ciudad Deportiva con instalaciones para los jóvenes. La duda de los vecinos hacia esta obra es que el contratista no tiene experiencia previa, según denunciaron a Ojoconmipisto.
El concurso identificado con el NOG 18911471 fue otorgado a Obras Integradas S.A, una compañía fundada en 2018 y que incrementó sus contratos con esta alcaldía en los últimos años. Costará Q12.8 millones.
El jefe edil, Leonel Arturo Chacón Barrios, presentó el proyecto a través de un video justo un día antes de comenzar la campaña electoral. Él busca reelegirse con el partido Vamos.
De acuerdo al estudio de factibilidad, la obra pretende beneficiar a jóvenes de la cabecera departamental. Con ello pretende ser un espacio de fomento al deporte y disminuir los índices de violencia.
Sin embargo, la Ciudad Deportiva suma ya distintas voces en contra, señalaron vecinos a Ojoconmipisto. Una de las razones es en la capacidad de la empresa contratada, cuyo representante es Edgar Mauricio Leonardo Requena.
El proceso
La licitación se hizo mediante el Fideicomiso de Apoyo a la Planificación Urbana de Cobán, una práctica utilizada de manera frecuente primero por la alcaldía de Ciudad de Guatemala y luego por Villa Nueva.
Esta modalidad le permitió a la comuna cobanera omitir al concejo municipal como filtro final para aprobar este proyecto millonario. En cambio, la decisión la tomó un comité técnico presidido por Juan Carlos de la Cruz Pereira, actual gerente municipal.
De acuerdo a las bases, la empresa a contratar debe tener experiencia en construir instalaciones deportivas. Pero al revisar el historial de las 40 licitaciones ganadas por Obras Integradas ninguna se refiere a ese ámbito.
Tras esas dudas distintos integrantes de los Consejos Comunitarios de Desarrollo (Cocodes) presentaron siete inconformidades y recursos de revocatoria, pero la municipalidad las rechazó.
A la medida
Si bien el contratista no demostró tener experiencia previa en otras entidades al construir instalaciones deportivas, sí presentó la constancia del Registro General de Adquisiciones del Estado (RGAE), avalado por esta dependencia del ministerio de Finanzas e indispensable para una licitación.
La compañía carecía de capacidad para realizar los trabajos mencionados a finales de enero, pero tras la convocatoria de la municipalidad para el concurso, el cual cerraba el 28 de febrero, pidió un nuevo permiso que lo certificara con este requisito.
Este nuevo documento lo obtuvo el 4 de mayo ya con la aprobación para construir canchas. El concurso, sin embargo, se adjudicó dos meses antes y el contrato aun no estaba firmado.
En resumen, la alcaldía avaló otorgarle un contrato de Q12.8 millones a una empresa sin experiencia demostrada y que obtuvo un permiso a última hora.
Se intentó obtener una explicación con representantes de la compañía, pero no atendieron a una entrevista. Tampoco lo hizo el portavoz de la municipalidad, Aníbal Motta.