El presidente Bernardo Arévalo anunció la reducción de su sueldo líquido. Este no es igual al salario base.
Por Carmen Valle
Al cumplir 100 días de gobierno, el presidente Bernardo Arévalo anunció la reducción de un cuarto de su sueldo. Esta disminución no es igual a la prometida por gobernantes anteriores y tiene consecuencias más allá del salario base.
Arévalo tiene distintos ingresos como presidente. Su sueldo inicial es de Q33 mil 588. El resto del dinero proviene de un bono de Q250 y gastos de representación por Q115 mil. De los últimos, como sucede con los alcaldes, no tiene obligación de rendir cuentas.
Esto suma Q148 mil 838, pero se le hacen descuentos por Q14 mil 363, entonces su salario líquido (es decir, luego de los egresos) equivale a Q134 mil 474, monto recibido en febrero y marzo de 2024. De este, anunció que se bajará el 25 %. Así, si las deducciones se mantienen, a partir de ahora devengará Q100 mil 855.
También recibe viáticos con los cuales se cubren los gastos por viajes dentro y fuera del país. Según el exministro de Trabajo, Luis Linares, “no se da un monto fijo cada mes, como sucede con los gastos de representación, y se deben comprobar las salidas”.
¿Por qué Bernardo Arévalo goza de ese sueldo?
El presidente está contratado bajo el renglón 011, como personal permanente. Goza de prestaciones y salario sin presentar factura cada 30 días. Su remuneración no se basa en un cálculo ni se mide por desempeño, sino es una cantidad heredada de otros gobiernos.
Quien estableció el salario vigente hasta la fecha fue Óscar Berger, mandatario de 2004 a 2008. “Nunca se justificó ese número. En otros países se calcula con base en el Producto Interno Bruto per cápita o cualquier otro medidor para que concuerde con el nivel de vida de la nación. En Guatemala, la cantidad no tiene respaldo”, señala Linares.
Así, la paga sin descuentos de un presidente guatemalteco equivalió a $19 mil 62 durante los últimos 16 años. Es el segundo mejor remunerado en Latinoamérica, después del mandatario de Uruguay con $22 mil 289. Incluso obtenía más que el gobernante francés, con $12 mil 883.
Los alcaldes no se quedan atrás
Algunos jefes ediles ganan la mitad o tres cuartas partes del sueldo presidencial. Por ejemplo, el alcalde capitalino, Ricardo Quiñónez, obtuvo Q61 mil 154 en marzo entre su salario, dietas, gastos de representación y bonos.
Mynor Morales Zurita, alcalde de Villa Nueva, recibió en el mismo mes Q74 mil 969. Su antecesor, Javier Gramajo, llegó a ganar Q147 mil y con eso convertirse en el tercer funcionario mejor pagado en Guatemala.
No solo sucede en Guatemala. En la cabecera de Quetzaltenango, el alcalde Juan Fernando López ganó Q99 mil 802 por su sueldo, dietas, gastos de representación y bonos durante febrero 2024.
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