Del Kyrios estaba obligada, según el contrato, a tener un seguro de riesgos contra accidentes para sus empleados. Aunque la municipalidad lo exige, no establece una sanción por incumplir.
Por Isaias Morales
La municipalidad de Guatemala se desligó de su papel de supervisar las condiciones y normas de seguridad en las que falleció Cristian Rosales, trabajador de una empresa subcontratada, al caer en un pozo de la red de colectores.
El 7 de enero de 2021, el alcalde capitalino firmó un contrato de Q2 millones 110 mil con la consultora y constructora Del Kyrios, propiedad de Enrique Ponsa Molina, para hacerse cargo de ampliar el sistema de aguas pluviales en zona 11. Este fue prorrogado hasta el 31 de julio de 2023 a causa de las lluvias de los últimos meses.
Sobre el accidente, la oficina de comunicación social compartió un documento del 15 de febrero en el cual recordó a la compañía cumplir con dotarles al personal de arneses, cascos y equipo básico. El oficio está firmado por el supervisor Oscar Subuyuy donde se refiere más al mal estado de las tapaderas de los pozos de visita.
Según la municipalidad, se le requirió a Del Kyrios, en reiteradas ocasiones, cuidar las condiciones de los empleados. Solicitó, además, a la empresa un informe, pero hasta la fecho aun no responden, agregaron.
Ojoconmipisto buscó conocer con el proveedor Enrique Ponsa, ingeniero civil, sobre las normas de seguridad en la cual estaban sus trabajadores, pero al cierre de esta no respondió las llamadas.
De acuerdo al contrato, Del Kyrios debe contar con un seguro contra accidentes, pero no se menciona qué tipo de sanción aplicar si se incumple con esta garantía. Solo habla de terminar el acuerdo de forma unilateral con anticipación de no entregar los trabajos a tiempo.
El contrato firmado tampoco establece cómo se procede si incumplen con garantizarles equipo de seguridad a los trabajadores y las condiciones de trabajo. Solo menciona el seguro vigente mientras dure el acuerdo.
De hecho, la dirección de Desarrollo Social se centra en supervisar si la empresa les entrega o no el trabajo requerido, de acuerdo a los documentos. Si incumplen se les impondrán multas.
La fianza vigente hasta julio próximo está valorada en Q211 mil con la aseguradora Fidelis, equivalente al 10 % del valor del acuerdo suscrito con TuMuni.
El trabajador de del Kyrios, Cristian Rosales, vestía uniforme de la municipalidad al igual que sus compañeros, lo cual se requiere en el contrato. Esta vestimenta lo costea la empresa y el diseño lo entrega la comuna.
Las normas de Salud y Seguridad Ocupacional (SSO), en las cuales no ahonda la municipalidad, establecen procedimientos de cómo cuidar cada detalle y evitar peligros para los trabajadores a la hora de descender pozos.
Si se incumple, la empresa deberá pagar una multa de entre seis y catorce salarios mínimos no agrícolas, según el Código de Trabajo. Es decir, hasta Q46 mil 585. Pero este punto lo omite mencionar TuMuni en los documentos y en sus respuestas públicas.
Reincidente
Esta no es la primera vez que Del Kyrios es cuestionada por no dotar de protección a su personal. El 17 de noviembre de 2022, Ojoconmipisto contó cómo les pagaba Q2 mil 500 mensuales a los empleados, una cantidad menor al salario mínimo de Q3 mi 209 en ese entonces por supervisar y darle mantenimiento a pozos y tanques de agua.
La compañía no les proporcionaba cobertura del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), lo cual incumplió con una de las cláusulas obligatorias del contrato por Q11 millones para estos trabajos por dos años. Y en esa ocasión la alcaldía también se desligó de su responsabilidad de supervisar.
Enrique Ponsa Molina es un proveedor que comienza a ganar notoriedad con TuMuni con la llegada de la pandemia en 2020. Desde entonces ganó ocho contratos por Q18.2 millones con la propia alcaldía y su Empresa Municipal de Agua (Empagua).
La compañía fue fundada en 1989 y tiene contratos con el Estado desde 2004 cuando empezó a utilizarse Guatecompras para registrar los gastos públicos. Hasta la fecha acumula 131 adjudicaciones por Q309 millones.
La licitación más onerosa ganada hasta ahora es por una escuela del Bicentenario en La Libertad, Petén, por Q44.9 millones con el ministerio de Comunicaciones. Esta debe entregarse el próximo 12 de abril.