Tras el envenenamiento de Loba, Negrito y Nucita en la colonia La Floresta, no hay planes municipales para detener el aumento de esta población. Organizaciones de rescate y vecinos asumen esta tarea.
Por Shirlie Rodríguez
En enero se cumplirá un año del envenenamiento de tres perros en Quetzaltenango. Orlando Guzmán, responsable del hecho, reconoció su culpa, pagó una sanción de Q90 mil a la Unidad de Bienestar Animal del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA). Pero la situación de los perros en las calles no ha cambiado en el municipio.
La municipalidad no tiene planes para atender este problema que las mismas organizaciones de rescate de perros demandan su abordaje constantemente. La unidad de Servicios Ambientales de la comuna indica que ha propuesto abrir una perrera municipal y apoyarse del ministerio de Salud para esterilizar a los animales, lo cual no ha sucedido.
En 2016, durante la administración de Luis Grijalva, también se propuso designar un espacio municipal esterilizarlos y darlos en adopción. La propuesta quedó en palabras.
El envenenamiento de Loba, Negrito y Nucita se hizo viral, causó indignación, pero sin mejorar este tema de salud. Aunque el alcalde Juan Fernando López también se pronunció sobre el tema, lo hizo sin propuesta, asignación de recursos ni un plan concreto.
Acciones desde lo privado
Estudiantes de la universidad Mesoamericana presentaron este año una propuesta en la cual involucran a empresas privadas para patrocinar la esterilización de 30 canes. Y así lograr nuevos recursos para continuar.
Aron Estrada, parte del proyecto indicó que su investigación reveló que los principales sectores en donde hay más población de perros es en los mercados La Terminal y La Democracia, por los restos de comida que quedan en el lugar.
Josefa Racancoj es voluntaria en rescate de animales. En cinco años de experiencia, las organizaciones responden a la necesidad que el gobierno municipal e incluso central, deberían atender.
“Nosotros buscamos fondos para la comida, para la atención veterinaria, los lugares en donde los resguardamos tampoco son gratis y además es difícil conseguir un hogar para todos, pero ninguna autoridad responde a estas necesidades”, dijo.
Vecinos se organizan
Vecinos de distintos sectores se han organizado para detener el aumento de perros sin dueño. Como en el barrio La Joyita, de dónde es Sergio Monzón, se unieron hace tres años y ahora tienen una mesa de diálogo en Gobernación Departamental para buscar soluciones a esta necesidad.
En la primera y segunda semana de enero iniciarán jornadas de esterilización. Contarán con el apoyo de los vecinos de distintos barrios y así puedan abarcar la mayor cantidad de perros posible. Son más de 30 mil perros sin dueño en Quetzaltenango.
El Centro de Salud reporta un descenso de la cantidad de personas atendidas por mordeduras de perros. El primer semestre de 2022 fueron 800, en el mismo rango de tiempo de 2023 asistieron a 500.
El personal de salud ofrece únicamente el servicio de vacuna contra la rabia, no se encarga de la esterilización de perros.
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Por Mirja Valdés
Mirja Valdés
Quetzalteca que estudió Técnico en Periodismo y Licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la Universidad de San Carlos. Reportera y editora en varios medios. Me gusta lo que hago. También los gatos 🐈.