La municipalidad de Santiago Atitlán abrirá de nuevo el lunes. Autoridades ancestrales de Santiago Atitlán y vecinos pidieron al TSE declarar vacante el cargo de alcalde.
Por Ana Valdez
Una delegación de Santiago Atitlán, Sololá, encabezada por la autoridad ancestral del pueblo maya tz’utujil llegó el viernes al Tribunal Supremo Electoral (TSE) para entregar un oficio donde solicitó avanzar en la destitución de su alcalde, Francisco Coché Pablo.
El TSE aceptó reconocer vacante en el puesto de alcalde dentro del concejo municipal. Acordaron permitir reabrir la municipalidad el próximo lunes 13 de octubre (2025).
El jueves 9 de octubre (2025) en un acto público y frente a la alcaldía, integrantes de la corporación municipal dieron lectura a un acta municipal en la que desconocieron en sus funciones a Coché Pablo.
Un día antes (8 de octubre), los vecinos protagonizaron una nueva concentración convocada por las autoridades ancestrales para pedir la renuncia al alcalde a quien señalan de cometer abuso de autoridad. El jefe edil manifestó que la renuncia debe ajustarse al marco legal.
Este es el primer período de Coché Pablo quien llegó con el partido Cabal. Según el Código Municipal (Artículo 54), en ausencia del alcalde se hace un corrimiento de puestos, en este caso asumiría el concejal I, Andrés Ajuchán Coo.
Señalamientos de corrupción
El sistema de justicia de Sololá otorgó un amparo provisional a Coché Pablo. El edil lleva 22 días ausente de su despacho tras señalamientos de corrupción y negligencia administrativa. La resolución emitida por el Juzgado de Primera Instancia Penal, Narcoactividad y Delitos Contra el Ambiente de Sololá, ordenó garantizar su ingreso al edificio municipal.
El 23 de septiembre en un comunicado de prensa, el jefe edil afirmó que él continuaba como el alcalde y que no presentó su renuncia ni pensaba hacerlo. Las autoridades ancestrales recabaron más de 7 mil firmas el lunes 15 de septiembre y acompañados de la población tomaron las instalaciones del edificio municipal para forzar la renuncia.
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El 23 de julio los pobladores retiraron con orden judicial las jaulas de tilapia, una especie ajena del lago de Atitlán. Se consideró que contribuyeron durante meses a contaminar el afluente, un problema que a criterio de la población, Coché Pablo no atendió a tiempo.
A esto se sumaron las denuncias ciudadanas sobre irregularidades en la extensión de licencias para más de 800 mototaxis.
