La alcaldía pensó en todo, desde micrófonos hasta una máquina de burbujas para el desfile. Para ello contempló cubrirlo con fondos públicos.
Por Carmen Valle
Este fue el año de volver a la presencialidad en varias actividades, cada una a su modo: los estudiantes regresaron a las aulas, los vecinos retomaron sus ferias y las reinas de belleza dejaron de ser coronadas por videollamada. Zaragoza, Chimaltenango, no se quedó atrás en ello y también organizó su certamen.
Tras las fiestas patrias, la municipalidad convocó a los vecinos para elegir a su reina en dos eventos programados para el 24 de septiembre y el 1 de octubre. Por eso hizo un concurso para contratar a una empresa que lo incluyera todo. Entre sus requerimientos se encontraban los micrófonos, las bocinas, las luces para el escenario, tres conductores, dos cantantes y un jurado calificador, todos “de renombre”, según las bases.
Además, se necesitaba decoración, para eso se pidieron pantallas gigantes donde se proyectaría la escenografía, cortinas para los accesos de las candidatas y los presentadores, una pasarela “con diseño exclusivo y faldones negros (…) para que las señoritas puedan tener un circuito y show coreográfico novedoso, con buena iluminación en los extremos para una mejor imagen de ellas”. También hubo efectos especiales a través de máquinas de humo, burbujas, confeti y fuego.
Las aspirantes se llevan la mejor parte, porque para ellas se pidieron cuatro vestidos, cuatro pares de zapatos, cuatro coronas (una más grande para la ganadora), cuatro bandas bordadas, una capa, un cojín y accesorios para los trajes de gala. Quienes no resulten elegidas también recibirán algo, porque se compraron reconocimientos para las señoritas fotogénica, popularidad, mejor sonrisa y mejor cabello.
Quien ganó el concurso, no el de belleza, sino el de Guatecompras, fue Mercedes Alvarado Guzmán. La única en ofertar y se le adjudicaron Q89 mil 900. Ella representa a Stay On Sonido & Producciones, la cual ha prestado sus servicios a entidades públicas desde 2014 por un total de Q2 millones 926 mil 574.
El evento con 70 requerimientos fue una compra directa con oferta electrónica publicada el 12 de septiembre. Las propuestas debían presentarse el 14 y cinco días más tarde estaba adjudicado.
“Un uso eficiente de los recursos prioriza mejorar los servicios públicos antes que otros gastos. En temporada de lluvias, con la amenaza de percances naturales, no necesariamente refleja una capacidad de ahorro de dinero en caso de una emergencia”, comenta el analista de Acción Ciudadana, Marvin Flores.
El 27 de septiembre, de hecho, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres reportó un derrumbe en la ruta entre Zaragoza y San Juan Comalapa. Además, para ese momento un sector de la aldea El Cuntic llevaba cuatro días sin agua y, a pesar de llamar al fontanero municipal, aún no había respuesta sobre cuándo se restablecería el servicio, cuenta la vecina, Ruth García.
Al llamar en siete ocasiones al celular del alcalde, Hugo Leonel Pérez Meléndez, nadie contesta, mientras en el teléfono de planta de la municipalidad solo responde la operadora. Sin embargo, los documentos de Guatecompras registran a la comunicación municipal de feria como solicitante para incluir esto en el plan anual de compras, con el visto bueno de Francisco Santiago García Balán, el director financiero.
En el acuerdo 189-2022, la comuna justificó la compra con que “son atribuciones del alcalde disponer gastos, autorizar pagos y rendir cuentas” y esto forma parte de la recreación y cultura de la ciudad.
Zaragoza es uno de los municipios más cercanos a la cabecera de Chimaltenango, a 11 kilómetros de distancia. Tiene 24 mil 22 habitantes y su jefe edil, Hugo Pérez, llegó al puesto por primera vez en 2019 con uno de cada tres votos a su favor.
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