Treinta alcaldías realizaron 73 concursos para surtir a sus vecinos en tiempos de pandemia.

Por Carmen Maldonado Valle
Durante 2020, 30 municipalidades convocaron a proveedores a ofertar agua para llevar a los lugares que no la tenían. En ello gastaron Q17 millones 797 mil 296, en plena pandemia cuando más se pedía el lavado de manos.
La que más invirtió en este servicio fue la de Barberena, Santa Rosa: entre febrero y junio pidió pipas en seis ocasiones valoradas en Q3 millones 625 mil. Juan Flores, encargado del departamento de agua potable, dice que hay temporadas donde “el sistema de distribución de agua no se da abasto y es necesario llevarla a las casas por medio del transporte adecuado”.
Para el 10 de junio de 2020 la comuna contaba con ocho camiones arrendados, que debían estar disponibles las 24 horas para llegar a los hogares que lo necesitaran. El contrato se firmó con “Inversiones Río de Plata”, propietario de los vehículos para tenerlos hasta julio 2021.
La empresa, representada por Javier Franco, hace negocios con el Estado desde 2006 y ha facturado desde entonces Q97 millones 334 mil 736, provenientes de las adjudicaciones por parte de las municipalidades de Barberena, Cuilapa, San Rafael lasFlores, Santa Cruz Naranjo y Taxisco, todas en Santa Rosa.
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Chiantla, Huehuetenango, también ha necesitado de estos servicios en cuatro ocasiones para “prevenir la COVID-19 en el municipio de Chiantla”, según uno de los concursos publicados en Guatecompras. “Nuestro municipio es el que más agua tiene en todo Huehuetenango, pero la gravedad no permite que llegue a las aldeas ubicadas en partes altas. Para ellos hicimos las contrataciones”, dice el jefe edil, Elvis Tello.
El Censo 2018 registraba que seis de cada diez hogares no reciben agua entubada, cuatro de ellos acudían a chorros públicos y manantiales para abastecerse de ella. “Instalamos tuberías y así ha llegado a más hogares, pero aún necesitamos resolver el problema de las partes altas. Lo estamos planeando y esperamos tener una solución este año”, agrega el alcalde.
En las cuatro adjudicaciones, Chiantla invirtió Q1 millón 238 mil 850. Dos estuvieron a cargo de Grupo Q que en 2020 trabajó también para las municipalidades de Todos Santos Cuchumatán, también en Huehuetenango, y San Pedro Carchá, Alta Verapaz. En las otras dos operaciones, el proveedor fue Mario López, representante de la compañía “SEICAA”, a quien se le pagaron Q45 mil el 2 de abril, y dos meses después se le contrató por Q59 mil 850 para la misma tarea, como consta en Guatecompras.
En Chicamán, Quiché, las cifras del INE revelan que cuatro de cada diez casas no reciben agua potable y las demás dependen, en su mayoría, de la lluvia para acceder a ella. Por ello, la comuna publicó seis concursos en Guatecompras para arrendar camiones cisterna por Q1 millón 818 mil 022.
En el acta 43-2020 del concejo municipal se aclara que la alcaldía “por ser de reciente creación, no cuenta con bienes muebles y tampoco con camiones propios para satisfacer las necesidades de nuestro municipio”. Por ello debía priorizarse la obtención de estos vehículos.
“Estamos construyendo pozos e instalamos tuberías para que las casas tengan agua, pero mientras esos trabajos terminan necesitamos gestionar quién cubra esta necesidad. Esperamos reducir este gasto en 2021”, dice Pedro Gamarro, jefe edil de Chicamán.

La adjudicación más grande que hizo para esta tarea fue por Q729 mil 865. Los camiones se usaron para 1 mil 469 viajes con agua y el responsable fue Freicen Alonzo, aclara el contrato. El proveedor es representante legal de la comercializadora “Little Manhattan”, y desde 2018 ha ganado siete concursos con la comuna de Chicamán y uno más con la de Cunén, Quiché. También ha estado a cargo de 56 operaciones sin concurso con las mismas instituciones.
El problema del verano
Guatecompras refleja que de las 73 adquisiciones publicadas por las municipalidades, 43 ocurrieron entre marzo y junio de 2020. Mayo fue el mes con más compras de pipas de agua y arrendamientos de camiones cisterna.
“Hicimos sistemas que captan el agua de los ríos y la llevan a una especie de pozo donde se le da tratamiento. Luego esta va a las casas, pero el verano fue difícil para todos porque bajó el nivel de los nacimientos”, cuenta Víctor Figueroa, alcalde de Uspantán, Quiché.
Añade que las personas esperan “un invierno bendecido”, como el del año pasado, porque allí sube el nivel de los ríos y el agua les llega con más presión. “Aprovechan porque saben que es la única época en la que eso pasa”, agrega.
Reconoce que aunque se cobran Q10 mensuales a cada hogar para acceder al sistema de distribución, no existe un control sobre cuánto gastan las familias. Por esa razón, según Guatecompras, la comuna adquirió 1 mil 650 contadores por Q767 mil 250, destinados a instalarse en los hogares. A decir del alcalde, aún no hay un dato exacto de cuánto se cobrará por metro cúbico de agua consumido.
En el mismo mes, Santa María Ixhuatán, Santa Rosa, pidió pipas de agua para sus habitantes en tres ocasiones y eso le costó Q585 mil 900. En 2017, datos del Instituto de Investigación y Proyección sobre Ambiente Natural y Sociedad, de la Universidad Rafael Landívar, califica como “muy alta” la demanda de agua en el municipio, pero el gasto público no satisfacía esta necesidad.
Para Luis Rojas, encargado de servicios públicos de la comuna, “era necesario pedir los vehículos porque aún no lográbamos llevar agua a todos los sectores del municipio. Si no la tenían antes, menos en verano, y con la pandemia resultaba importante abastecer a los vecinos para evitar más contagios”.
Como detalla Guatecompras, dos de los concursos fueron adjudicados a José Baca, por Q450 mil, contratado también en mayo por San José Pinula, Guatemala, para llevar agua a sus vecinos.
En 2021, hasta el 24 de febrero las municipalidades de Flores, Petén, Gualán, Zacapa, y Guastatoya, El Progreso, han adjudicado tres concursos por pipas de agua por Q88 mil, Q747 mil 560 y Q180 mil, respectivamente. Otros 22 requerimientos del mismo servicio aún están vigentes.