La localidad no tiene mercados organizados, las basura se arroja en las calles y los vecinos reciben aire al abrir los chorros en sus hogares.
Por Carmen Maldonado Valle
“La prioridad es el agua potable. Entiendan, por favor” se lee en uno de los comentarios realizados en la publicación de Facebook de la municipalidad de Malacatán, San Marcos. Anuncian su nueva plaza central: tendrá juegos para niños, una fuente, más árboles, sanitarios, iluminación y “colores armonizados”. Una obra de Q3 millones 983 mil 952.
Como consta en la boleta publicada por la alcaldía en Guatecompras, Malacatán “es un municipio con demasiado movimiento de personas y comercio, por encontrarse ubicado en una zona fronteriza, entonces es necesario mejorar el parque para brindar a la población un espacio público donde pueda recrearse” (sic).
El mismo documento dice que las instalaciones actuales están en malas condiciones, contaminan y no son atractivas para la población, por ello lo demolerán para edificar uno nuevo. “No se ve bien, es cierto, pero es porque no se poda la grama ni se limpia, y eso le corresponde al personal de la municipalidad”, dice Manuel Velasco, vecino del lugar.
Según cifras del censo 2018, seis de cada diez hogares en Malacatán no tienen acceso a agua entubada. Los otros cuatro llevan un mes sin ella, se queja el vecino, y cuando cae un poco lo almacenan en tinacos. No saben cuándo volverá el servicio de forma regular. Al reparar en la nueva construcción, enviaron un memorial a la alcaldía para saber por qué la harán, hasta ahora sin respuesta.
Velasco explica, además, que Malacatán no tiene mercados organizados y la municipalidad no los ha ubicado en un espacio específico: “Antes se instalaban en las calles los fines de semana y era ordenado, pero comenzaron a vender todos los días y ahora se hace un embudo en las calles porque los carros no logran pasar entre las ventas”, describe.
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Yener Villagrán, el jefe del Consejo Comunitario de Desarrollo (Cocode) del cantón San Juan de Dios, concuerda con Velasco en que las dos necesidades más grandes del lugar son el agua potable y un espacio para el mercado, pero agrega una más: la extracción de basura en la vía pública.
“Cuando se retiran las ventas callejeras, quedan muchos desechos y no se recogen. La municipalidad no ha resuelto ese problema y tampoco nos da respuesta sobre si lo va a realizar o no”, sostiene Villagrán.
Guatecompras registra la contratación de una compañía para extraer la basura de los mercados durante 2021. La comuna le paga Q176 mil 280 cada mes para cumplir con ello pero, como confirma Velasco, las calles nunca quedan limpias por completo.
La encargada de información pública de la alcaldía, Renata Barrera, justifica la falta de agua con que se da mantenimiento a los pozos, pero “no sabemos cuándo va a terminar este trabajo para volver a la normalidad. Tampoco hay planes de mejorar las condiciones de los mercados”.
Al cuestionar a Barrera por qué se priorizó el remozamiento del parque, argumentó que el único autorizado para declarar sobre ello era Jorge Meoño, el director de planificación. Este, por su parte, se negó a continuar con la entrevista y dijo que el personal de la alcaldía solo responderá a las preguntas si se le visita en el edificio municipal.
El alcalde de Malacatán es Emilio Obdulio Gálvez Pérez, ganó con el partido Compromiso, Renovación y Orden (Creo). Este es su primer período.
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