Informe de la pandemia enviado al Congreso revela discrepancias estadísticas. Las autoridades de Salud realizaron una auditoría que evidencia estas inconsistencias
Por Isaias Morales
El director de la Comisión Presidencial de Atención a la Emergencia COVID-19 (Coprecovid), Edwin Asturias, reveló en su tercer informe remitido al Congreso el 30 de junio que los datos difundidos por el ministerio Salud de casos positivos por coronavirus, no coinciden con los del registros del Sistema de Información Gerencial de Salud (SIGSA), entidad que almacena la información de la pandemia.
Estas brechas, según el análisis del funcionario, pudieron incidir en “aplanar un pico de la enfermedad detectado por la investigación” a causa de algún brote en abril pasado. O, en otras ocasiones, como la segunda semana de junio, pudo “no evidenciar la disminución de pruebas positivas durante algunos días”.
Una gráfica presentada durante los resultados de la auditoría al SIGSA en distintas fechas de abril, mayo y junio, se difundieron menos casos.
Asturias indicó que no hay documentación para respaldar si el Departamento de Epidemiología a cargo de procesar la data, dio el reporte correcto al entonces ministro de Salud, Hugo Monroy; si este lo modificó o si lo recibió alterado.
La ministra de Salud, Amelia Flores, confirmó en entrevista a CNN que “había un subregistro a todo nivel, no solo en el reporte de pruebas realizadas, los fallecidos no se reportan el mismo día y algunos se hacían una semanas después. Aun así, el número de recuperados, sabemos que es mucho mayor, pero a la fecha no se tiene un dato exacto”, aseguró.
La auditoría presentada por Asturias y Flores en conferencia de prensa virtual concluyó que la diferencia de casos de SIGSA con los de Salud al corte del análisis fueron 158 casos positivos, lo cual representa un 0.84 por ciento de diferencia. Desde el 20 de junio hay una correlación apropiada entre ambos sistemas. La base de datos se seguirá mejorando en los próximos días.
Una de las modificaciones que presentó Salud en los últimos días es el horario de cierre para procesar las estadísticas de la pandemia. Antes, el reporte se daba actualizado hacia las 15:00 horas del mismo día. Desde el jueves 26 de junio se empezó a reportar los datos de la fecha anterior a partir de las pruebas realizadas entre las 00:00 horas a las 23:50.
Lucrecia Hernández Mack, diputada de Semilla y exministra de Salud, considera que después de la auditoría, el ministerio debe detectar aquellos casos que hayan sido omitidos en los reportes de los hospitales públicos, privados y laboratorios. “Que se pueda hacer un ajuste de la curva de la epidemia, no con la fecha en que se haya confirmado el caso, sino cuando se tomó la muestra porque sabemos que se fue acumulando una gran presa (de muestras sin procesar)”, aseguró.
La discrepancia en los datos es un tema que cobró notoriedad en las últimas semanas. El 9 de junio, elPeriódico publicó que Salud modificó, en cinco ocasiones, las cifras de los enfermos en su sitio web. Los cambios que encontró el matutino se dieron los días 17, 27, 28 y 31 de marzo, también el 9 de abril.
Una razón por la cual renunció el director de Epidemiología, Manuel Sagastume, fue por la variación en la cifra de fallecidos a causa de la COVID-19. Salud registraba 20 menos que los datos que esa dependencia en las solicitudes de información pública y a diputados de la bancada Semilla.
Un reporte enviado por Epidemiología al Congreso, del 29 de junio, da cuenta de que a ese día fallecieron 742 personas, pero los datos reportados por Salud para esa fecha fueron 746, es decir, una diferencia de cuatro. Aunque esta cifra aún no cuadre, la brecha entre ambos reportes se cerró en los últimos días tras la auditoría ordenada por las nuevas autoridades de Salud y el director de la Coprecovid.
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