A 13 meses de las elecciones generales, las administraciones actuales comienzan a construir instalaciones deportivas a inaugurarse, en mayoría, en 2023.
Por Carmen Maldonado Valle
Las elecciones generales sucederán en junio de 2023, pero un año antes al menos 47 alcaldías han adjudicado concursos valorados en Q37 millones 610 mil 498 para edificar o remodelar canchas y estadios. No es una tendencia nueva, porque los años (y Guatecompras) demuestran cómo mientras más se acercan las elecciones, más presupuesto se dedica a esto.
La primera municipalidad en publicar un concurso de este tipo en el año fue la de Barberena, Santa Rosa. A solicitud del líder del Consejo Comunitario de Desarrollo (Cocode), Elden Peña Urrutia, debe mejorarse el estadio “El Cerinal” porque “es de gran importancia para el fomento del deporte y el desarrollo, no solo de la aldea, sino de toda Barberena”, justifica.
Según el Cocode, en el municipio abundan los interesados en practicar fútbol y papi fútbol, pero las áreas recreativas actuales casi colapsan. Por esa razón, se lee en las bases, en el estadio se colocarán nuevos vestidores, gramilla sintética, malla perimetral, un área para bancas, sanitarios y se pintará todo el lugar.
A cargo de esto estará la Constructora y Transportes JP, la única oferente, y se le pagarán Q3 millones 680 mil. Se intentó consultar en la alcaldía por qué se priorizó esta inversión, pero al indicar a los trabajadores que se trataba de una entrevista periodística para Ojoconmipisto, terminaron la llamada y no volvieron a responder.
Este no es el primer remozamiento al estadio “El Cerinal”, pues años antes se destinaron Q50 mil 761 a la reconstrucción del techo. El gasto ocurrió en 2018, un año antes de las elecciones generales.
Otra municipalidad interesada en el deporte este año es la de Nuevo San Carlos, Retalhuleu. Por un total de Q8 millones 316 mil 720 mejorará dos estadios: uno en el casco urbano y otro en el caserío Candelaria Xolhuitz.
A decir de la dirección financiera, estos lugares requieren estar siempre en buen estado porque no solo se usan para jugar fútbol, sino también para eventos culturales o presentaciones para el esparcimiento de los vecinos. Durante el invierno, las correntadas y las goteras dificultan asistir a estas actividades, entonces deben resolverse estos problemas.
Remodelar el primero costará Q3 millones 310 mil 560. “Lo necesitamos también porque mejorará la salud de nuestros habitantes, además de alejar a los jóvenes de las drogas y del teléfono. Para nosotros, un deportista más es un delincuente menos”, asegura el presidente del Cocode de Candelaria Xolhuitz, Francisco Rafael.
Quien se encargará de este trabajo es José Alfredo Trigueros López, proveedor de comunas de Retalhuleu y Sololá desde 2005, por cuyos servicios ha facturado Q159.5 millones. Este año sus dos únicas adjudicaciones han sido las de los estadios de Nuevo San Carlos. Por el segundo recibirá Q5 millones 6 mil 160.
El patrón municipal
Los encuentros deporitivos suceden en temporadas determinadas y los aficionados las esperan, lo mismo sucede con las construcciones municipales de instalaciones deportivas. Los últimos dos años de gestión se convierten en la época de aumento de presupuesto para este rubro.
Durante la administración anterior, del 20 de enero de 2016 al 31 de diciembre de 2017 Guatecompras reportó Q49 millones 240 mil 526 gastados en edificar o remodelar canchas, polideportivos y establecimientos de este tipo. El año preelectoral y el electoral, 2018 y 2019, la cantidad ascendió a Q110 millones 832 mil 379.
En las corporaciones actuales esta tendencia apunta a volver. Del 20 de enero de 2020 al 31 de diciembre de 2021 se dedicaron Q44 millones 439 mil 96 a construir estadios. Esto equivale a casi lo mismo que en cuatro meses y medio de 2022, el año preelectoral, se ha invertido en ello (Q37.6 millones).
Las construcciones no se hacen por réditos políticos, dice el subdirector de planificación de Uspantán (Quiché), Dennis Pú, sino porque las comunidades las piden y se aprueban “para tener habitantes satisfechos con una obra bien hecha”. En su municipio se hicieron mejoras al estadio Jacinto Enrique Flores Cano en 2021 por Q6 millones 820 mil 987.
En ese municipio, la Organización de Naciones Unidas determinó como principales dificultades para los pobladores la desnutrición y los servicios de salud deficientes, y por ello tienen enfermedades como la diarrea y el resfriado común como sus mayores causas de morbilidad. “Entregamos víveres cada cierto tiempo, pero la nutrición no es responsabilidad municipal, sino de la Secretaría de Seguridad Alimentaria”, explica Pú.
Para la analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales, Irene Flores, la priorización adecuada de proyectos, según las necesidades de cada ciudad, podría darse si las corporaciones tuvieran una mejor planificación y antes de invertir determinaran cuáles son los mayores obstáculos enfrentados por los vecinos. Sin embargo, admite, “un estadio o una feria son visibles y dejan a pobladores contentos. Unos drenajes que no se ven, no siempre”.
Desde 2020, las administraciones actuales han invertido Q81 millones 959 mil 948 en instalaciones para el deporte. Además de los estadios de Barberena y Nuevo San Carlos, hay en proceso otros 46 mejoramientos y construcciones de canchas, estadios y polideportivos en Jutiapa, Jalapa, Totonicapán, Sololá, Huehuetenango, Suchitepéquez, Petén, Guatemala, Quiché y El Progreso por Q25.6 millones.
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