Luis Macario López Vaíl, que llegó con la coalición Valor-Unionista, prometió construir de tanques de agua y fortalecer los programas de limpieza.
Mirna Alvarado
La prioridad municipal de Luis Macario López Vaíl, alcalde electo, será suministrar agua a las comunidades de Huitán, Quetzaltenango. “El municipio tiene muchas necesidades, pero lo más urgente es el suministro de agua”, enfatizó.
El concejo municipal 2020-204 deberá administrar un presupuesto estimado de Q22 millones, y dará prioridad a solventar la escasez de agua y a la construcción de plantas de tratamiento de basura y de aguas residuales que está obligado a tener.
“La administración actual implementó un sistema para recoger la basura en la cabecera municipal, el cual debe ser ampliado. Necesitamos vehículos y programas de educación ambiental”, agregó.
Los planes también contemplan la construir de calles y sistemas de drenajes. “Eso implica plantas de tratamiento para evitar que las aguas residuales generen malos olores u otro tipo de contaminación”, dijo el electo.
López resultó electo como alcalde de Huitán, Quetzaltenango. Fue postulado por la coalición Valor-Unionista, obtuvo 1 mil 555 votos sobre los 1 mil 454 que recibió el actual alcalde, Cesar Calderón. Él encabezó la planilla de Vamos.
Vamos tendrá representación en el concejo
Según el censo poblacional de 2018, en Huitán hay 18 mil 322 habitantes. La Ley Electoral y de Partidos Políticos determina que por el tamaño de la población el concejo municipal se debe conformar por nueve personas.
Macario López Vaíl estará acompañado de dos síndicos titulares y un suplente, así como de dos concejales titulares y un suplente pertenecientes a la coalición Valor-Unionista. Dos concejales titulares son del partido Vamos.
Obras express
Sobre el proceso de transición López Vaíl comentó que a principios de septiembre se realizó una reunión de cortesía en la municipalidad, pero no se programó fecha para una próxima donde quieren conocer aspectos administrativos y financieros.
A mediados de agosto el alcalde Cesar Calderón firmó convenios con el Consejo Departamental de Desarrollo para varios proyectos de mejoramiento vial, lo que le causó dudas.
“Nos preocupa porque el tiempo mínimo para construir un edificio o un tramo carretero es de dos o tres meses. Este será uno de los cuestionamientos que haremos. Queremos saber cuáles son y cuantos quedarían pendientes de entregar”, refirió.