Más de la mitad de los hogares no reciben agua dentro de la casa y la municipalidad lleva dos años sin destinar fondos a drenajes o al abastecimiento de este recurso.

Por Carmen Maldonado Valle
Según el Censo 2018, seis de cada diez hogares en Tamahú, Alta Verapaz, accedían al agua a través de tuberías afuera de la casa, pozos públicos o fuentes naturales. Aun así, la alcaldía no destina fondos para disminuir la estadística desde hace dos años.
Guatecompras reporta que la última adquisición municipal relacionada con mejorar el suministro de agua ocurrió en junio de 2019 durante la administración pasada. Invirtió Q87 mil 828 en limpiar y reparar el entubado en el casco urbano.
“Llevábamos varias semanas sin agua y estábamos seguros de que era a causa del mal estado de las tuberías, porque no se cambiaban desde hacía 60 años, más o menos. Lo solicitamos y en un mes empezaron los trabajos”, dice el coordinador del consejo comunitario de desarrollo (Cocode), Desiderio Caal. Tras ello, el servicio volvió a la normalidad.
Ese año también se construyeron drenajes para Chipacay, uno de los 16 caseríos del municipio. Costaron Q132 mil 521, consta en Guatecompras. También se contrató en tres ocasiones a la empresa Proinclo con el fin de limpiar el tanque de distribución y vender insumos para tratar el agua en tres ocasiones, por un total de Q69 mil 800.
En 2020 tomó posesión como jefe edil Eduardo Moll Santa Cruz. Desde entonces, las únicas dos compras relacionadas con saneamiento ocurrieron el 2 de abril de 2020 y el 28 de abril de 2021. Ambas fueron por pastillas para clorar el agua, en la primera se gastó Q17 mil 370 y en la segunda, Q23 mil 400.
Tamahú se encuentra a 41 kilómetros de Cobán, la cabecera de Alta Verapaz. El último censo nacional de talla concluyó que en ese municipio, seis de cada diez niños evaluados tenían algún grado de desnutrición, y según una investigación del Equipo Humanitario de País, para 2019 el lugar aún tenía “alta vulnerabilidad ante la desnutrición aguda y la inseguridad alimentaria”.
Para el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia —Unicef, por sus siglas en inglés— en departamentos como Quiché, Huehuetenango, Chiquimula y Alta Verapaz, es alta la incidencia de malnutrición “debido a la falta de acceso a alimentos adecuados, servicios básicos de calidad, agua potable y saneamiento”, ya que el consumo de agua sucia aumenta el riesgo de padecer enfermedades gastrointestinales y no permite la absorción adecuada de nutrientes.
Tamahú se encuentra en alerta amarilla ante el contagio de coronavirus, de acuerdo con el semáforo vigente. Allí confirmaron 68 casos y a la fecha el ministerio de Salud no reporta muertes por dicha enfermedad.
La prioridad eran las piscinas municipales
Desde 2020, la comuna de Tamahú ha adjudicado 16 concursos destinados a reparar calles, restablecer el alumbrado público y donar víveres. Se hizo uno más para remodelar el centro turístico municipal y ninguno para mejorar el suministro de agua.
Como muestra Guatecompras, la alcaldía pagará Q895 mil por remozar el balneario “Las azufradas”. Se restaurarán los baños, el parqueo, los vestidores, los toboganes y las piscinas. La municipalidad lo justifica con que “las malas condiciones en que se encuentra disminuyen la visita de turistas extranjeros”.
Eduardo Moll se convirtió en jefe edil en 2019, cuando ganó las elecciones con 2 mil 188 votos a su favor, 14 más que su oponente. Representa al partido VALOR y este es su primer período en el cargo.
Para esta nota se intentó contactar al alcade, al director de planificación y al director de servicios públicos a través de su celular y el teléfono de la comuna en 28 ocasiones. A pesar de llamarlos en diferentes días y horarios, la secretaria indicaba que siempre estaban en reunión y por ello no podían atender. En la última conversación, ella se comprometió a devolver la llamada en cuanto terminaran las juntas, pero eso no sucedió.