El río Guacalate atraviesa Chimaltenango y Sacatepéquez, arrastra contaminación y desinterés. Pero ahora, autoridades locales impulsan la creación de una entidad que lo proteja.

Por Julio Sicán
Una nueva propuesta busca rescatar el río Guacalate, uno de los cuerpos de agua más afectados por la contaminación entre Sacatepéquez y Chimaltenango. La iniciativa surge desde la Comisión Departamental del Medio Ambiente (Codema), del Consejo Departamental de Desarrollo (Codede) donde se planteó crear una Autoridad Protectora del afluente.
María Angelina Aspuac, gobernadora y presidenta del Codede, impulsa esta propuesta. “Lo que hacen los alcaldes no es suficiente. Se necesita compromiso e involucramiento de las comunidades en sus riberas”, dijo. La idea sigue el modelo del río Pensativo, donde se estableció una figura legal de protección.
El Congreso aprobó el Decreto 43-98 en 1998, pero nunca nombró a la autoridad ni elaboró su reglamento ni plan de manejo. Bajo el liderazgo de Aspuac se reactivó la gestión para dar una solución real.
Te recordamos esta nota: Tres alcaldías y dos gobernadores se enfrentan por la contaminación del río Guacalate
La propuesta se aprobó en Asamblea del Codede, el 27 de junio. Pide a los diputados de Sacatepéquez presentar una iniciativa de ley que permita crear la autoridad con presupuesto propio y capacidad de recibir donaciones del sector privado.
Diagnósticos y biobardas
Luis Rodríguez, delegado departamental del Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN), respaldó la propuesta. “La problemática del río Guacalate es múltiple. Hemos hecho diagnósticos en municipios como Pastores, Jocotenango, La Antigua Guatemala, Ciudad Vieja, San Miguel Dueñas y San Juan Alotenango y el problema es grave”, detalló.
Rodríguez explicó que ya existen acciones municipales, como la biobarda instalada en Ciudad Vieja para atrapar plásticos. Se planea replicar este sistema en Pastores y Jocotenango, donde el río ingresa al departamento.
También destacó que el problema rebasa los límites de Sacatepéquez. El río nace en San Andrés Itzapa, Chimaltenango, atraviesa municipios como El Tejar y Parramos; en Escuintla cambia de nombre a río Achiguate. “Estamos en conversaciones con autoridades de Chimaltenango para formar mesas de trabajo conjuntas”, dijo.
Plantas de tratamiento
El río Guacalate recibe aguas residuales, industriales y desechos sólidos. En San Miguel Dueñas, por ejemplo, ya se elabora un diagnóstico para redirigir las conexiones de aguas negras hacia el sistema municipal y no directamente al río.
Si alguna empresa llega a verter aguas industriales, deberá pagar un resarcimiento de Q1 millón, según Rodríguez. El MARN trabaja en un plan a mediano plazo (2024-2027) para construir nuevas plantas de tratamiento en municipios como San Antonio Aguas Calientes, San Miguel Dueñas y Ciudad Vieja. “Pero deben ser funcionales y con diseño técnico adecuado”, aclaró.
Además, insistió en que los Planes de Ordenamiento Territorial (POT) deben separar las aguas pluviales de las residuales.
Apoyo desde las municipalidades y comunidades
Carlos Enrique Cubur, alcalde de Sumpango y presidente de la mancomunidad Mancomusac, apoyó la propuesta. “Cualquier iniciativa a favor del río es necesaria, pero debe contar con su propio presupuesto”, afirmó. El Programa de Fortalecimiento de Capacidades Técnicas que ejecuta la Mancomusac podría incluir el acompañamiento técnico de plantas de tratamiento, dijo.
Desde la comunidad, María Elena Castellanos, presidenta del Cocode de San Bartolomé Becerra, La Antigua Guatemala, pidió acciones urgentes. “La contaminación es grave. El río arrastra plásticos que se acumulan en nuestra aldea. Lo hemos limpiado, pero no basta. El problema es multicausal y se necesita la participación de todos”, explicó.
Mirja Valdés
Quetzalteca que estudió Técnico en Periodismo y Licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la Universidad de San Carlos. Reportera y editora en varios medios. Me gusta lo que hago. También los gatos 🐈.