Ipala, Amatitlán y Villa Nueva compran mascarillas 4 veces más su precio

01 abril 2020

OPS/OMS insiste en que solo personal de salud y pacientes con síntomas respiratorios deben usarlas. Pese a ello, las alcaldías las reparten a vecinos y funcionarios.

Amatitlán compró mascarillas al doble del precio en el mercado. Foto: Facebook municipalidad de Amatitlán.

 

Por José Pablo del Águila

 

La Dirección de Atención al Consumidor (Diaco) estima que una mascarilla N95 cuesta, en promedio, entre Q19.50 y Q25. Sin embargo, las municipalidades de Villa Nueva, Amatitlán e Ipala, en Chiquimula, las compraron a un precio dos y hasta cuatro veces mayor.

 

Villa Nueva

Adquirió 300 mascarillas, cada una en Q110, es decir, cuatro veces más cara que los precios de referencia de la Diaco. El monto total fue de Q33 mil adjudicado a Nandi Mercantil, Sociedad Anónima. Este proveedor desde 2006 a la fecha le ha facturado Q29 millones 973 mil al Estado.

Javier Gramajo, alcalde de Villa Nueva, justificó vía Whatsapp que la oferta de Nandi S.A. no era la más cara entre las tres que recibieron. Aseguró que la eligieron porque era la que entregaba en menor tiempo para atender la crisis.

Se cuestionó al jefe edil si estaba al tanto de que el producto lo compró cuatro veces más caro al precio tope de la Diaco, pero ya no respondió la consulta. Julio Vásquez, portavoz de la municipalidad, agregó que la empresa ofreció la entrega en tres días. Además, dijo, hay “escasez de producto”.

Este es el primer período de Gramajo. También es el primer año que Nandi Mercantil S.A. le vende a la comuna. En total, Villa Nueva le ha adjudicado Q1 millón 460 mil 905 en trajes estériles de uso hospitalario, mascarillas, jabón en gel, dispensadores y atomizadores, lentes plásticos de protección y 180 termómetros digitales. Todas las compras fueron por excepción.

La actividad económica que reporta la empresa son publicaciones periódicas, libros, mapas, partituras, carteles, catálogos, sellos postales, papel moneda, entre otros. Este año también ha vendido al ministerio de Salud  y al IGSS desde insumos de librería hasta material de odontología.

El representante legal de Nandi Mercantil S.A. es Gabriel Gerardo García Martínez. Se intentó consultarlo a dos teléfonos reportados, pero ambos estaban fuera de servicio.

 

Amatitlán

Compró 15 mascarillas n95 a Q48.5, casi el doble de su valor máximo. El gasto total fue de Q727.50 y la proveedora, Yésica Paola Sical Urízar.

Se intentó contactar al alcalde Mainor Orellana, pero no respondió su celular. Personal del departamento de Compras refirió que “los precios han variado”, pero no ofrecieron mayores detalles. Una persona que no se identificó se limitó a decir “los precios han variado”.

Este año, Sical Urízar ha sido contratada por otras municipalidades para proveer servicios y materiales relacionados a la construcción, como sacos de cemento, alquiler de retroexcavadoras y reparación de alumbrado público, entre otros.

 

Ipala

Compró al Hospital Centro Médico Santa Ariadna 1,380 N95 a Q50 cada una. Igual que Amatitlán, al doble del valor de referencia. En total la alcadía gastó Q69 mil. El alcalde Esduin Jerson Javier Javier, conocido como Tres Kiebres, no quiso dar explicaciones.

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El Centro Médico también vendió 60 mascarillas n95 al ministerio de Salud a Q60 cada una, más del doble de su precio límite.

Ojoconmipisto contactó vía telefónica al hospital. Al hacerles ver el sobreprecio, indicaron que no podían dar detalles.

 

Silvia Escobar, directora de la Diaco, comentó que los precios de referencia son para mayoristas, aunque el precio al por menor no debería variar. “El costo de una mascarilla N95 está entre Q19.50 y Q25. Pero, si viene alguien y la vende a Q80 o Q125, por ejemplo, es una situación desproporcionada”, refirió.

 

 

La funcionaria explicó que la Diaco verifica las denuncias y, si se considera una sobrevaloración en el precio, interpone una denuncia contra el representante legal de la empresa responsable por el delito de especulación, regulado en el artículo 342 del Código Penal. Se penaliza con dos meses hasta seis años de cárcel y multa de Q200 mil.

Se consultó con Mónica Monge, asesora del despacho en la Contraloría General de Cuentas (CGC), como procederían para verificar que las compras no estén sobrevaloradas. En respuesta envió un comunicado institucional donde se insta a las entidades de gobierno verificar que los establecimientos a los cuales adjudican estén legalmente establecidos y que los montos ofertados no estén sobrevalorados.

 

No son necesarias

La Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) recomiendan que la mascarilla solo la use el personal médico que atiende casos de COVID-19 y las personas que tienen síntomas respiratorios, como estornudos o tos.

Las personas que no están enfermas no necesitan usarlas. Basta con mantener medidas de higiene como el lavado de manos y el aislamiento social.