El abstencionismo es la constante sombra que acecha a las elecciones en Guatemala. El proceso 2023 no fue la excepción.
Por Carmen Valle
En la primera vuelta electoral conocer los resultados toma tiempo. Entre que los ciudadanos tardan más porque deben marcar cinco papeletas, y el conteo para elegir alcalde que, además, define a quiénes integrarán su concejo municipal a través del método de D’Hondt.
Otros no ejercen su derecho. En promedio, el 35 % de los ciudadanos no asistió a nivel nacional a emitir sus sufragio el 25 de junio de 2023.
Hace cuatro años, en 2019, hubo 87 municipios donde cuatro de cada diez personas no votaron por corporación. Hubo alcaldes que llegaron al cargo con pocos votos, como Villa Nueva con la aprobación del 6.94 % del padrón; Chinautla con el 8.88 % o la cabecera de Quetzaltenango con el 12 %.
En 2023, esa cifra ascendió a 119, según el Tribunal Supremo Electoral. Así, los nuevos alcaldes de los mismos municipios una vez más se eligieron con poca representación: el jefe edil de Villa Nueva llegó al cargo con el favor del 7.89 % del padrón; la de Chinautla con el 9.12 % y el de Quetzaltenango con el 14.27 %. Los dos últimos fueron reelectos.
A criterio de la politóloga, Celia Luna, que al menos la mitad de la población votar durante la primera vuelta es favorable, pues demuestra el interés por tener autoridades legítimas. Aun así, explica, no es que todos los que no fueron a votar no tuvieran motivación para hacerlo.
“En muchos lugares no hay transporte eficiente. Por eso, aunque pueda verse mal, resulta favorable cuando los partidos movilizan a las personas. No necesariamente es acarreo, sino que en el lugar no se ofrecen condiciones para moverse a diario, menos para las elecciones”, sostiene.
Además, sugiere tomar en cuenta aspectos como la migración, porque es posible que haya gente registrada para votar que ya no viva en el mismo departamento o en el país y por lo tanto no asiste ese día al centro de votación asignado. “Puede pasar mucho tiempo entre la actualización de datos del ciudadano y los comicios. En ese período se pueden ir de un lugar, pero el Tribunal Supremo Electoral planifica con la última información obtenida de las personas”, añade Luna.
Los municipios donde más proporción de ciudadanos se abstuvo de votar fueron Cuilco, La Democracia y San Pedro Soloma en Huehuetenango, Tacaná en San Marcos y San Carlos Sija en Quetzaltenango. Según el Instituto Guatemalteco de Migración, los tres departamentos a donde pertenecen se encuentran entre los cinco con mayor proporción de migrantes. En estos lugares, entre 56 y 58 de cada 100 ciudadanos no acudieron a las urnas.
De ellos, Cuilco y San Pedro Soloma vuelven a estar entre los municipios con más abstencionismo. En 2019 hubo un 61 % de abstencionismo en Cuilco y en 2023 fue el 58.86 % (es el municipio con menor proporción de votantes este año). En San Pedro Soloma, en 2019 se abstuvo el 60.17 % de los ciudadanos y en 2023 fue el 57.98 %.
En tanto, los municipios con mayor porcentaje de votantes fueron San Pablo la Laguna, Santa Catarina Palopó, San Juan la Laguna, San Pedro la Laguna y San José Chacayá, todos en Sololá. En ellos solo hubo entre 11 y 14 % de abstencionismo.
También puedes leer: Bernardo Arévalo llegó a la presidencia sin el apoyo de los alcaldes
