En enero, colegios abrieron las puertas a los estudiantes y lo mismo se espera en el sistema nacional en febrero. Aun así, no todos los establecimientos tienen las condiciones de saneamiento requeridas para iniciar clases.
Por Carmen Maldonado Valle
Guatemala tiene 49 mil 264 centros educativos privados, por cooperativa, municipales y oficiales. De estos, 40 mil 899 no tienen sanitarios para los estudiantes y la mitad no tiene drenajes, según cifras del ministerio de Educación (Mineduc).
Los 22 departamentos tienen establecimientos en estas condiciones. En Alta Verapaz, por ejemplo, ocho de cada diez no tienen baños ni entubado, en promedio, y tres no acceden al agua. “Como alcaldes apoyamos en esto y se vuelve más necesario ahora, con las clases presenciales. Al menos en mi ciudad trataremos de hacerlo durante el año para darle a los niños las herramientas para prevenir contagios de COVID-19”, dice el jefe edil de Panzós, Ernesto Ramírez.
En ese municipio hay 205 centros escolares y 169 tienen agua, pero 133 no tienen sanitarios para los estudiantes. Al preguntarle si existe algún plan concreto para llevar esta infraestructura o cuántas escuelas se planea remozar para garantizar el saneamiento al menos en algunos sectores de Panzós, negó tener datos precisos sobre ello.
A 334 kilómetros de allí, en Chimaltenango, se localiza San Martín Jilotepeque. Tiene 279 centros escolares y 172 no cuentan con baños. “De ser necesario ayudaremos a estos lugares a tener las condiciones higiénicas necesarias para recibir a los niños, pero no es competencia nuestra. El Mineduc es el encargado”, asegura el alcalde, Bartolomé Chocoj.
El artículo 70 del código municipal delega a las comunas al menos seis competencias y una de ellas es la construcción y/o mantenimiento de instalaciones escolares. Además, el artículo 30 obliga a la corporación a designar una comisión encargada de velar por la educación.
Chocoj niega tener un plan concreto para brindar baños a las escuelas existentes. “Pero con la educación se puede contribuir de muchas maneras. Un ejemplo son nuestros proyectos para expandir la red de drenajes, lo cual beneficiará también a estos centros”, añade.
Marvin Zepeda, el jefe edil de El Progreso, Jutiapa, coincide con Chocoj, pues aunque le asombra la existencia de establecimientos sin saneamiento en su ciudad, niega que la comuna sea responsable de mejorarlos. En su jurisdicción los 64 centros escolares registrados tienen agua, pero 46 no tienen baño.
“No es nuestra obligación como alcaldes, pues le corresponde al Mineduc remozarlos, pero de ser necesario se hará. Aun así, en la municipalidad no hemos recibido solicitudes de directores para esto, y nosotros no somos adivinos para saber dónde ayudar sin que nos lo pidan”, añade Zepeda.
El freno para remozar escuelas
El ciclo lectivo en el sector oficial inicia el 15 de febrero. Cuatro días antes de ello, el ministerio de Salud publicó el acuerdo 33-2022 para regular el regreso a clases presenciales respecto a medidas sanitarias para prevenir contagios de COVID-19. Entre ellas se encuentra la constante higiene de manos y la disponibilidad de estaciones con agua y jabón para los alumnos y el personal.
En el país, el Mineduc reporta 5 mil 782 establecimientos educativos sin agua, por lo cual no pueden cumplir con las normas establecidas por Salud. “Esos problemas vienen desde hace años y la pandemia solo los resaltó. El ministerio no se ocupó de ello y tampoco las municipalidades. Incluso pensábamos que la cuarentena animaría a las autoridades a hacer estas reparaciones, pero no sucedió en todos lados”, sostiene la coordinadora de la Gran Campaña Nacional por la Educación, Gabriela de Búrbano.
En tanto, José Castellanos, director municipal de planificación de Villa Canales, admite deficiencias en las instalaciones escolares que podrían ser atendidas por las comunas, pero también menciona los obstáculos para llevar a cabo un proyecto de este tipo: “Debemos enviar al Mineduc un expediente completo con nuestros planes de mejoramiento y mucha documentación para obtener su aval. En ocasiones, el trámite dura meses y eso es un freno porque se requiere mucho tiempo y esfuerzo solo para tener permiso”.
Al preguntar en Educación cómo se asegurará el Estado de tener escuelas higiénicas para el regreso a clases presenciales no respondió. Por su parte, Salud no inspeccionará el cumplimiento de las medidas establecidas en el acuerdo 33-2022 en los centros escolares porque, dice, eso es competencia del Mineduc.