Como sucedió con el vertedero de AMSA, este rebasó su capacidad y en febrero de 2021 se incendió. Según un informe del ministerio de Ambiente, “está fuera de control”.

Por Carmen Maldonado Valle
La municipalidad de Tactic, Alta Verapaz, publicó un concurso en Guatecompras en busca de empresas para gestionar el cierre técnico del botadero municipal. Se abrió en 1995 y, de acuerdo con el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN), allí “no hay un manejo adecuado de los residuos, entonces ocasionan un alto grado de contaminación”.
Según la oficina de comunicación de la cartera, se trata de un predio ubicado en la zona 2 del municipio y colinda con viviendas del barrio San Jacinto. Leticia Montes vive cerca de este terreno y para ella “es insoportable. Con las lluvias el mal olor llega a las casas, y se le decía al alcalde anterior, pero no nos hacía caso, entonces a saber si este (alcalde) lo cierra”.
Durante la última década hubo al menos cinco trabajos de graduación de la Universidad de San Carlos dedicados a este botadero. Uno de ellos, escrito en 2012, advertía cómo desde entonces este lugar representaba un riesgo para los habitantes si no se trataban los desechos.
“Es una amenaza para los recursos naturales, porque puede promover la extinción de especies animales y vegetales, pero también es un potencial foco de enfermedades”, se lee en el documento. “Los virus, bacterias, insectos y roedores encuentran alimento y un medio agradable para desarrollarse. Estos son excelentes transportadores de patógenos capaces de originar numerosas epidemias”, continúa.
Los riesgos fueron advertidos por la comuna en septiembre de 2020, cuando el director de planificación, Roberto Caal, solicitó una inspección al botadero “porque llevaba años sin ser intervenido y no sabíamos por dónde era prudente empezar”, asevera.
Un mes más tarde, el personal de la cartera acudió y lo calificó como un lugar “fuera de control”, porque se acababa el espacio para los residuos. Al no ser tratados, terminaban en las áreas periféricas del casco urbano y en el cauce del río Cahabón.
De hecho, en el informe se adjuntan fotografías de desechos en el río. Por esa razón, se ordenó el cierre técnico del terreno, el cual implica no solo dejar de recibir basura, sino también gestionar la correcta disposición de los líquidos provenientes de ella e instalar una planta de tratamiento.

Trabajo de hormiga
La unidad de gestión ambiental municipal está a cargo del proceso. Según Nancy Turcios, titular de esta oficina, “es evidente cómo el terreno contamina el ambiente, porque emana gases, produce lixiviados (líquido proveniente de la basura) y daña el paisaje. Afecta la calidad de vida de los vecinos y por eso se han quejado durante años”.
Al tener la resolución del MARN, ella hizo el requerimiento ante la alcaldía para comenzar el cierre. De acuerdo con la unidad de información pública, la comuna tardó un año en aprobar el proyecto porque se debía asegurar la disponibilidad de fondos. Aún no se estima un presupuesto para ello, pero al tratarse de una licitación, excederá los Q900 mil.
Las quejas de los vecinos, sostiene el personal de la unidad, aumentaron en febrero de 2021, cuando el vertedero se incendió. “El fuego es un riesgo inminente cuando estos sitios están mal gestionados, sobre si son cercanos al casco urbano. El de AMSA y este son un ejemplo de por qué se deben cerrar cuando acaba su vida útil”, asegura el ingeniero ambiental, César Barrientos.
A decir del “basurólogo”, el cierre técnico conlleva compactar la tierra casi todos los días y buscar formas para procesar el metano proveniente de los residuos acumulados. “Es trabajo hormiga y tardará años. Los estragos causados por este vertedero evidencian que debemos mejorar el diseño de estas instalaciones y especificar allí también una fecha para cerrar sus puertas”, añade.
En 2021 se aprobó un nuevo reglamento para la gestión de desechos sólidos. A partir de este año, se establecen cinco años como duración mínima para clausuras de sitios de disposición final de basura. Estos, a su vez, tendrán una vida útil no mayor a 15 años.
El concurso de Tactic aún no se adjudica, porque espera recibir ofertas el 16 de diciembre. En los últimos diez años, esta es la segunda inversión de la comuna relacionada con el botadero.