La denuncia contra Marcus González se declaró improcedente en La Antigua Guatemala, ahora su denunciante espera que la Corte de Constitucionalidad la ampare.
Por Julio Sicán
Marcus Alexánder González Pérez ejerce su tercer período como alcalde de Jocotenango, Sacatepéquez. En las tres ocasiones ha llegado con el comité Cívico MARCUS, siglas de Movimiento de Acción Renovado Cívico de Unión Solidaria. Su expareja sentimental, Pamela Azurdia, lo acusa de agredirla física y psicológicamente.
Lo denunció por violencia contra la mujer en su manifestación psicológica en el ámbito privado, a través de la Fiscalía de la Mujer del Ministerio Público (MP). El proceso buscaba retirarle su derecho de antejuicio al jefe edil para investigarlo por ello, pero no prosperó. La Sala Regional Mixta de la Corte de Apelaciones de Antigua Guatemala declaró improcedente las diligencias de antejuicio.
Azurdia interpuso un recurso de Amparo el 1 de septiembre último, con el fin de revertir lo dispuesto por esa Sala. “Lo que quiero es que le retiren el antejuicio para que lo investiguen y se haga justicia por los daños físicos y psicológicos que me provocó”, dice. Mantiene medidas de seguridad a su favor, entre las cuales el denunciado no puede acercarse a ella, a su casa o a su trabajo.
La denunciante fue más allá, hasta la Corte de Constitucionalidad (CC), pide que la ampare. Espera, dice, que la magistrada suplente, Claudia Paniagua, no interfiera en la búsqueda de justicia, pues “es vecina de Jocotenango y amiga de González”.
La acusación
De acuerdo con Azurdia, durante el tiempo que duró la relación de noviazgo (un año y siete meses), hubo agresiones físicas y verbales de parte de González que le dejaron cicatrices y daño psicológico. En los últimos dos meses ella vivió en casa de su entonces pareja y fue en ese tiempo cuando se agudizaron los problemas.
La afectada cuenta que sufrió un intento de estrangulamiento, amenazas con arma de fuego, control de sus redes sociales, infidelidades, hasta 30 llamadas telefónicas por día y en los alegatos que mantenían, Marcus, la trataba de “estúpida” y “prostituta”.
“Se convirtió en un círculo viciosos porque yo lo perdonaba pensando que cambiaría de actitud. Sin embargo, Marcus sufre de doble personalidad. No es el que la gente conoce”, dice.
Por su parte, González negó lo anterior según se lee en su declaración: “Por el contrario, la traté de lo mejor, la apoyé para que estuviera mejor, incluso laboralmente”. Y continúa, “existe un video donde ella expresa lo mucho que me ama y que soy el hombre de su vida que Dios le mandó y pide perdón por su actitud” (Sic).
Agrega que el padre de la denunciante es el diputado Mario Azurdia. “El tiene una organización política en Jocotenango que en las últimas elecciones su candidato quedó en segundo lugar, por lo que se ha aprovechado de este asunto para que yo no pueda participar y su candidato gane la alcaldía”. Al cierre de esta nota, González Pérez no respondió las llamadas de Ojoconmipisto.
En Sacatepéquez el caso no prosperó
El juez pesquisidor, Miguel León Ramírez, en su informe determinó que la denuncia se basó en una presunta vulneración de derechos de igualdad de la denunciante. Ambos mantuvieron una convivencia que se fracturó por desavenencias personales que se refutan uno en contra del otro, en la que los dos se ofendieron mutuamente con palabras soeces.
Además, no existe evidencias médico legal de agresiones físicas, pero sí de daño psicológico que puede generar investigación. Así como aspectos que tienen la finalidad de limitar a través de la judicialización las aspiraciones políticas del denunciado.
Con estos argumentos, los magistrados de dicha sala concluyeron que la denuncia que motivó las diligencias de antejuicio no pueden prosperar porque no se verifican los hechos que revelen alguna acción constitutiva de delito. Ahora se espera la respuesta de la CC, si ampara o no a Pamela Azurdia.