Concejal de día, productor musical de noche

En más de cinco años como concejal de Siquinalá, Escuintla, el productor musical Julio Otoniel González Lobos ha sido contratista de municipalidades por un valor total de Q246 mil 500.

Por Emiliano Castro Sáenz

Cuatro meses y medio después de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) le adjudicara el cargo de concejal primero de Siquinalá, Julio Otoniel González Lobos ofrecía su primer servicio de audio y tarimas por Q15 mil 500 a la vecina municipalidad de La Democracia, en el departamento de Escuintla, a través de su empresa Estación de Baile Dance Station.

Así comenzó el camino de este concejal con las municipalidades de La Democracia, Masagua, Escuintla y Chicacao, Suchitepéquez, así obtuvo 13 contratos en tres años que suman Q246 mil 500.

Concejal contratista

Su carrera política empezó en 2012, cuando fue designado concejal primero de Siquinalá. El vencedor de la elección fue Carlos Stuardo Dardón Grajeda, con la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y González Lobos fue postulado por el Partido Patriota (PP) para la Corporación Municipal.

En 2015 se repitió la fórmula: Dardón Grajeda fue reelecto y González Lobos, designado concejal tercero.

Tras la primera compra directa que lo benefició en mayo de 2012, siguió otra actividad más ese año por Q11 mil. Y después, se desataron los pedidos: siete en 2015 (seis en La Democracia y uno en Masagua) que sumaron Q152 mil 500; y cuatro más en 2016 (dos en Masagua y dos en Chicacao), que costaron en total Q67 mil 500.

El montaje más caro que prestó la Estación de Baile Dance Station fue por Q32 mil, el 23 de junio de 2015, con motivo de la coronación de la reina de aldea Cuyutá, contratado por la municipalidad de Masagua, Escuintla.

La empresa de González Lobos se especializa en sonido terrestre y aéreo, tarima, toldo, luces y grupos musicales –como Los Ángeles Azules, La Sonora Dinamita o Artilleros Musical–, y ha sido solicitada en fiestas patronales, ferias titulares, coronaciones de reinas, día de las madres e inauguración de canchas de fútbol, según consta en el portal Guatecompras.

Además de los contratos con el Estado, el concejal tercero de Siquinalá ha llevado por su cuenta sus bocinas y grupos a otras localidades, como el Halloween 2016 en Santa Lucía Cotzumalguapa, Escuintla; el cierre de cursos de la facultad de Derecho de la Universidad de San Carlos (Usac) el año pasado; o la inauguración de la feria en el propio Siquinalá, en 2015, entre otras decenas de eventos. Esta última actividad no figura dentro de las contrataciones de esa alcaldía, pero sí en la página de Facebook de Dance Station.

Concejal evasivo

Ojoconmipisto buscó por la vía telefónica desde el jueves 17 de marzo a Julio Otoniel en la municipalidad de Siquinalá y en su empresa de producciones musicales, pero no obtuvo respuesta.

En cuatro oportunidades logró comunicarse con el concejal, quien indicó que hablaría después por falta de tiempo. Esto no sucedió. El lunes 20 de marzo, una mujer contestó el teléfono de González e indicó que la presión de llamadas y mensajes de WhatsApp serían tomadas como una amenaza, pese a que se solicitó su postura de la nota e información de la empresa. La mujer expresó: “Los únicos que deben fiscalizar a los funcionarios son la Contraloría General de Cuentas, ustedes no”.

Por su parte, el jefe de Recursos Humanos de la comuna, quien no se identificó por su nombre, colgó el teléfono en un par de ocasiones. Se quejaba de que en un primer momento el periodista quisiera saber de compras y contrataciones del concejal tercero, y en un segundo momento preguntara por la temporalidad en que había trabajado en el Concejo Municipal.

Asimismo, la municipalidad respondió de forma negativa una solicitud de información vía correo electrónico, pues requería otros datos y señalaba que “se nos trasladó información que usted llamó a los teléfonos 7880-1974 (de la municipalidad) haciéndose pasar por un vendedor de productos de sonido y que deseaba ofrecer los productos al señor en mención derivado (sic)”.

Sin embargo, pidió una prórroga y el 5 de abril respondió que Julio Otoniel González Lobos ha sido miembro de los concejos municipales de 2012-2016 y 2016-2020 como síndico I y concejal III, respectivamente. Durante ambos periodos «ha devengado un salario de Q12,000 mensuales».

Concejal cuestionado

Pese a que los contratos de Julio Otoniel González Lobos no han sido efectuados en la municipalidad de la que es concejal, podría haber incurrido en ilegalidades del Código Municipal y la Ley de Probidad y Responsabilidades de Funcionarios y Empleados Públicos. Una presentación prevista para el 12 de enero pasado fue suspendida.

El abogado constitucionalista Pablo Bonilla, explica que al tener un puesto de elección popular no puede ser contratista. “El concejal oferta a otro ente, lo que pareciera otorgarle doble calidad: funcionario y contratista. No me parece lógico”, indica Bonilla.

Según el artículo 45, inciso b, del Código Municipal, no puede ejercer las funciones de alcalde, síndico o concejal “el que directa o indirectamente tenga parte en servicios públicos, contratos, concesiones o suministros con o por cuenta del municipio”.

Pese a que Bonilla interpreta el artículo como la imposibilidad de ser contratista del Estado y concejal, admite que “no es clara la redacción del artículo para interpretar un supuesto. Sea con un municipio o por cuenta del municipio al cual representa, no debería de ofrecer sus servicios. Pero si la prohibición aplica, no está claro”.

Ese artículo fue utilizado por el TSE para negarles sus cargos a 11 alcaldes y un concejal, tras las elecciones de 2015. Al argumento de que un alcalde o concejal no pueden ser contratistas, como dice el artículo 45, el Tribunal sumó el literal c del artículo 19 de la Ley de Probidad y Responsabilidades de Funcionarios y Empleados Públicos (decreto 89-2002).

Este establece que a los funcionarios públicos les queda prohibido “recibir directa o indirectamente, beneficios originados de contratos, concesiones o franquicias que celebre u otorgue el Estado, sus organismos, las municipalidades y sus empresas o las entidades autónomas y descentralizadas”.

Sin embargo, la Corte de Constitucionalidad y la Corte Suprema de Justicia ampararon a los alcaldes y concejal sindicados por el TSE, pues indicaron que el tribunal se extralimitó en sus funciones.

In situ

El Manual de organización y funciones de la Municipalidad de Siquinalá, Escuintla (2010) indica que un concejal no tiene dependencia jerárquica y tiene a todas las unidades bajo su mando. No devenga un sueldo, aunque podría ser remunerado cuando los ingresos municipales lo permitan, siempre que sea por el sistema de dietas por cada sesión a la que asistan o dictamen que emitan.

En 2016, el Concejo Municipal de Siquinalá cobró dietas por cargos representativos por Q134,000 y Q1,500,000, según renglones 062 21-0101-0001 y 062-31-0151-0001, de la Ejecución de Egresos del Ejercicio 2016 de la comuna.

Nombre o razón: Julio Otoniel González Lobos
Nombre comercial: Estación de Baile Dance Station
NIT: 1652424-1
Estatus: habilitada, activa y solvente ante la Superintendencia de Administración Tributaria.
Publicaciones: 13
Años: 2012, 2015 y 2016
Monto: Q246 mil 500

*Las fotografías que acompañan este texto fueron publicadas en la cuenta de Facebook de Dance Station.

Nota de redacción:

El jueves 15 de junio, Julio Otoniel González Lobos se comunicó para “aclarar” la información publicada en este sitio. A su criterio, el medio la publicó sin su consentimiento, sin embargo, se trata de información pública. También se quejó de que no se hubiera desglosado cada evento facturado por su empresa Dance Station, pues “solo nos quedan como Q3 mil, el resto se va en los grupos y diversos renglones”.

La nota refiere que el concejal III de Siquinalá obtuvo 13 contratos en tres años que suman Q246 mil 500, que pueden ser consultados en este link de Guatecompras. El periodista contactó a González para conocer su opinión al respecto. Lo llamó a la municipalidad, lo contactó a su teléfono celular y habló con su esposa, pero él no quiso atender las llamadas.

El concejal y productor musical se comprometió a enviar un documento en que desglosaría los concursos facturados para demostrar que él se quedaba “con muy poco”, pero no lo hizo. Envió esta carta de cuatro páginas, escrita en tercera persona, que acompaña este texto.

Estación de Baile Dance Station, menciona en su misiva, paga a los grupos musicales nacionales Q10,000 y Q16,000 a los internacionales. »

«Cuando llega a tomar el cargo político, el Sr Otoniel González no le faltaba el  trabajo en su empresa, ni tampoco la hizo a un lado por dedicarse a la política. Ni su trabajo se forma más fuerte por tener un puesto en la municipalidad de siquinala. Ni tampoco lo utiliza para cubrir eventos en otras municipalidades. Y mucho menos obliga a ser uso de sus servicios. La Empresa Dance Station no se crea después obtener un cargo en la municipalidad para aprovecharse de él., se adjuntan documentos donde se ve la fecha que se empieza a laborar» (sic), se lee en la carta.

El 17 de junio, el concejal III se comunicó de nuevo con el periodista para exigir que se retirara la nota. Se le explicaron las razones por las que no es posible atender su solicitud.

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Emiliano Castro Sáenz
castronailime@gmail.com

@EmilianoCS Periodista mexicano-guatemalteco. Escribo de política, derechos humanos y deportes.